La  salud  

 

 

     Mucho tiempo antes que el médico haya extendido el certificado de defunción,  comenzamos  a morir por partes, debido a la inanición, contaminación, acidez, desarmonía electromagnética,  en un proceso al comienzo imperceptible. 

 

     Por falta de conocimientos nos confundimos y consideramos que la falta de salud es algo natural que se va dando a lo largo de nuestras vidas y de lo que no nos podemos librar y que debemos soportar con cierta filosofía de vida.  

 

    Erupciones en la piel, dolores de cabeza, alergias, resfriados, gripe, sinusitis en una primer etapa, luego debilitamiento de glándulas, cansancio al despertarse, falta de libido sexual, debilitamiento de órganos, tiroides, glándulas suprarrenales, hígado, riñón, corazón, trastornos mentales son solamente algunos pocos ejemplos de resultados de un desequilibrio del terreno biológico que pueden resolverse con solo recuperarlo.

 

     Nos alimentamos para nutrir a nuestras células, en caso de no lograrlo por motivos diversos llegamos a la inanición en grado variable. El cerebro es parte de esas células y cuando desnutridas, afecta al individuo en aspectos que hacen a su salud física, capacidades mentales , comportamiento y estado de felicidad.

 

     La inanición tiene varias causas como por ejemplo la falta de una buena alimentación, es decir lo que elegimos para llevar a la boca. Pero tal vez la más importante no es tomada suficientemente en cuenta por la medicina alopática aunque sí es bien conocida por ésta, principalmente por los médicos especialistas gastointestinales: una costra negra que se va adhiriendo a las paredes internas del intestino dificultando que los  jugos gástricos  accedan al bolo alimenticio dentro del intestino delgado y con ello el proceso de digestión se ve obstaculizado total o parcialmente, produciendo putrefacción, acidez en todo el organismo, congestión de la sangre que deja de fluir normalmente al resto del organismo, desequilibrio térmico, y además esta costra negra también obstruye total o parcialmente la absorción de los nutrientes, produciendo inanición en  grado variable Este cuadro produce auto-contaminación con foco en los intestinos, obstrucción de la ruta de los nutrientes y acidés en todo el organismo.

 

     Una excelente alimentación no asegura por sí sola una excelente nutrición.

 

     La auto-contaminación se puede producir en diversas partes internas del organismo, como en la boca por ejemplo, pero la que mayor incidencia tiene, se produce en los intestinos delgado y grueso, por una digestión inadecuada que produce la putrefacción de los alimentos. Esta putrefacción tiene varias causas, una de ellas es no contar con suficiente jugo gástrico necesario para la digestión, por la misma costra dura y negra comentada anteriormente que impide su acceso; también se produce con la leche y sus derivados en el caso de los adultos por no contar ellos con las enzimas necesarias para su digestión, como en cambio sí ocurre en los niños. Esta auto-contaminación envenena y acidifica al organismo.  

 

     La importancia trascendental de la auto-contaminación para la vida fue considerada a principios del siglo pasado, por el Dr. Alexis Carrel, premio Nobel de medicina en 1912  quien  en base a un experimento realizado con células de embrión de pollo, en 1936 llegó a la siguiente conclución:

 

      "La célula es inmortal, es simplemente el líquido en que está bañada el que degenera. Renovad este líquido regularmente. Aportad a las células los medios para limpiarse y el pulso de la vida se podrá prolongar indefinidamente".

 

    La contaminación ocurre por varios motivos,  es ampliamente conocida y difundida por diferentes medios, pero la auto-contaminación es menos tomada en cuenta, el término pretende llamar la atención que el foco contaminante está dentro de nuestro propio organismo, principalmente en el intestino y es motivo de varias enfermedades como falta de visión o parálisis de los miembros,  aparentemente inconexas con las causas.

 

     Esta auto-contaminación también se produce por los desechos biológicos y cadaveres de virus, bacterias, hongos y parásitos que ocurren en todo el orgnismo en general y conforman una de las causas del desequilibrio del terreno biológico.   

 

     La "higiene intestinal" es ampliamente tratado por el Dr. Mariano José Bueno Cortés quien explica cómo se ha descubierto este fenómeno de manera accidental al limpiar los intestinos de un paciente y resolverse otros problemas aparentemente inconexos como la ceguera y una parálisis de piernas.

 

    El proceso contaminante iniciado en nuestro intestino delgado y grueso, se expande a todos los tejidos del cuerpo a través de la sangre, produciéndose un círculo vicioso en detrimento del equilibrio del terreno biológico, que de llegar a superar un cierto umbral, comienzan a manifestarse los estados patológicos, según la escuela del Dr. Antoine Béchamp y el Dr. Claude Bernard basada en la aceptación de la existencia de organismos pleomorficos que mutan según las condiciones del terreno biológico (medio). A esta escuela se la denomina pleomorfismo.

 

 

       Queda claro que existen dos teorías encontradas: pleomorfismo Vs. monomorfismo.

 

    Aunque el Dr. Alexis Carrel se refería en sus libros a Pasteur con mucho respeto, sus concluciones referidas al experimento de las células de embrión de pollo vienen a corroborar la importancia del medio, en un todo de acuerdo con Bernard y Béchamp, este último el enemigo acerrimo de Pasteur. 

 

     Podemos mencionar a científicos que avalan a la teoría del pleomorfismo:

 

     Afirman que en su lecho de muerte, el mismo Sr. Louis Pasteur (no era egresado de ninguna facultad) afirmó que el Dr. Claude Bernard tenía razón. No lo mencionó a su archi enemigo Béchamp.  

 

1         El Dr. Rudolf Virchow, es considerado como el padre de la teoría de los gérmenes o monomorfismo. Afirman que unos años antes de morir dijo "Si pudiera vivir mi vida otra vez, quiero dedicarla a probar que los gérmenes buscan su hábitat natural,... los tejidos enfermos que causan enfermedades". Una demostración más que no existen enfermedades sino enfermos. O sea que los cuadros patológicos son el resultado del desequilibrio del terreno biológico.

3   

        El Dr. E.C. Rosenow del Biological Laboratorios de Mayo, demostró la existencia del pleomorfismo al variar la alimentación y con ello conseguir que muten neumococos a estreptococos "y viceversa".

4      

        El Dr. Otto Warburg, dos veces galardonado con el premio Nóbel en medicina, la segunda vez en el año 1.931 por sus aportes en la respiración celular dijo: Donde hay oxigeno y alcalinidad no puede haber ninguna clase de enfermedad ni cáncer, esto es una clara explicación que a su entender, las enfermedades, incluso el cáncer, dependen del medio o del desequilibrio del terreno biológico, en el campo de la acidés-alcalinidad.

 

5        El Dr. René Quinton en 1.912 erradicó la epidemia de cólera que asolaba El Cairo sólo con inyecciones de agua de mar isotónica filtrada en frío. De esta manera restituía la alcalinidad perdida por el aumento de acides, que en la sangre de las arterias debe estar a un pH entre 7,36 y 7,46. El agua de mar posee todos los elementos de la tabla periódica, por lo tanto nutre, y además tiene un PH 8,4 por lo tanto alcaliniza el metabolismo generalmente en estado ácido permanente por estrés, contaminación y desnutrición. Hoy resurgen estas terapias en todo el mundo.

 

     

       El Profesor John Beard, en 1.902, de la Universidad e Edimburgo ha manifestado que "no existen diferencias discernibles entra las células cancerosas altamente malignas y determinadas células pre-embrionarias como las denominadas TROFOBLASTO". Este descubrimiento más datos estadísticos referente a un pueblo en Pakistán sin cáncer y estudios científicos de laboratorio han detectado uno de los motivos que disparan de manera incontrolada a los tumores cancerosos y las causas por las que el organismo pierde su aptitud de defenderse: la falta de una substancia denominada nitrilosidas o amigdalina, descubierta por el Dr. Ernest Krebs Jr. en 1950 . A esta substancia, por ser necesaria para la vida, la catalogó como vitamina B17. Otra vez más tenemos como causa de enfermedades la alteración del equilibrio del terreno biológico, en este caso por carencia nutritivas.

 

         El Dr. Russell Blaylock, contemporaneo nuestro  realiza una divulgación científica basada en experiencias realizadas con grupos humanos y estudios científicos de laboratorio y datos estadísticos en la que pone en evidencia la incidencia nefasta de ciertos alimentos y contaminantes considerados inocuos en el cerebro y como consecuencia, en el estado anímico y comportamientos de las personas.

           

             La medicina orthomolecular acepta como principal causa de una serie de enfermedades a la desnutrición y contaminación de las células buscando métodos naturales para la sanación. Los seguidores de esta escuela en su afán de no ganarse enemigos de la medicina alopática, ningunean al mentor, médico filósofo Hipócrates, y al iniciador moderno, con su aporte de la escuela del pleomorfismo, Dr. Antoine Béchamp y sus seguidores. No obstante ello, sean bienvenidos porque contribuyen a la medicina clásica, la que se perpetúa por buena.